PABLO PANIZO
12 de diciembre de 2023

Los economistas Daron Acemoğlu y Simon Johnson han afirmado en su más reciente publicación, Power and Progress, que el desarrollo tecnológico genera el riesgo de elevadas redundancias en el mercado laboral. Esto va en línea con lo que ha adelantado el Foro Económico Mundial: para 2027, unos 83 millones de puestos de trabajo desaparecerán. Aunque se espera la creación de 69 millones de empleos, el resultado será una pérdida del 2% de los trabajos.

“Las mujeres van a ser las principales damnificadas, fundamentalmente por la manera como se ha ido construyendo a través de los años la composición dentro del mercado laboral”, señaló David Tuesta, exministro de Economía y Finanzas, en el IX Seminario Internacional STEAM+H. Los empleos con mayor demanda serán aquellos relacionados con la informática, arquitectura, matemáticas e ingeniería, campos en los que las mujeres todavía tienen poca participación.

Acciones necesarias

Tomando en cuenta que la igualdad de género debe formar parte de la estrategia de sostenibilidad o ESG de las empresas, es indispensable tomar acciones en ese frente. Para derribar estas trabas, es fundamental promover referentes mujeres en el campo STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), así como en finanzas. De acuerdo a UNICEF, 85% de mujeres están más animadas a creer que pueden alcanzar una posición de liderazgo cuando hay otras mujeres líderes en sus compañías.

Tuesta destacó también la importancia de la creación de lugares de educación y de trabajo inclusivos y la necesidad de políticas de gobierno enfocadas en mujeres para la formación educativa y profesional en áreas STEM y financieras, así como abordar las brechas salariales y promover políticas favorables a la familia. 

Entre las características culturales que es necesario trabajar, Tuesta consideró especialmente relevante fomentar la autoconfianza y la motivación, dada su importancia para reducir la brecha de género, principalmente en el campo de la educación financiera.

A la cola de Latinoamérica

Las labores administrativas son las que en mayor proporción desaparecerán con la transformación digital. Dado que las mujeres ocupan en mayor porcentaje estos puestos, serían las principales afectadas por la pérdida de empleos, explicó Tuesta. 

Este problema es especialmente grave en el Perú, el país con la mayor brecha de género de entre las ocho mayores economías de Latinoamérica, de acuerdo al Índice del Desarrollo Social de la Mujer y el Hombre en los Países de América Latina, publicado este año por Centrum PUCP.

Amplias diferencias en
profesiones STEM

En el campo de las ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas (STEM), apenas un 28% de la fuerza laboral es femenina, según cifras recientes de Massachusetts Institute of Technology. En el Perú, esta brecha es evidente en cifras como el que solo el 8% de programadores web son mujeres, de acuerdo a UNICEF, o el hecho de que apenas existan tres investigadoras mujeres por cada diez investigadores hombres, según el Registro Nacional Científico, Tecnológico y de Innovación Tecnológica (Renacyt).

“Si uno ve las estadísticas, es interesante observar que coinciden, a nivel grueso, los niveles de brecha de género que se encuentran en el ámbito de STEM con lo que es educación financiera. Básicamente están alrededor del 30%”, destacó Tuesta. Esta coincidencia, explica, está motivada por las mismas razones.